Automotriz, metales básicos y agro serán los sectores que más crecerán en 2010

La baja de la actividad económica registrada en el primer semestre del año tuvo implicancias en la mayor parte de los sectores que configuran la estructura productiva nacional. La brusca caída de los niveles de producción que se observó en el primer trimestre fue consecuencia de la baja de las ventas totales. Las empresas fueron reduciendo sus stocks acumulados, proceso que se mantuvo a un ritmo menor en el segundo trimestre.

Entre los sectores más golpeados, se cuentan algunos de los que presentaron una dinámica más expansiva en el período anterior a la crisis, como el automotor y el de los metales básicos (hierro y acero). La merma de la producción agrícola, por su parte, se debe en mayor medida a un conjunto de factores desfavorables: la fuerte sequía y la reducción de los precios internacionales.

En el tercer trimestre de este año, se comenzó a notar un leve repunte en los niveles de producción de la industria, lo cual daría la pauta que se ha alcanzado un piso de baja en el primer semestre. No obstante, tanto la producción como las ventas son reducidas si se las compara con el mismo período de 2008.

Algunos de los sectores más golpeados por la crisis serán los principales protagonistas de la recuperación de la actividad en 2010. Eso se debe a la mejora de las perspectivas de la economía mundial, que repercutirá favorablemente en los indicadores locales.

En primer lugar, debemos destacar la cosecha agrícola esperada para la campaña 2009-2010, que será sensiblemente superior a la que la antecede. Por las mejores condiciones climáticas, se espera que la producción agregada de los tres cultivos principales (soja, trigo y maíz) sea un 37% mayor que la anterior (72,5 millones de toneladas).

A su vez, el aumento de la demanda regional repercutirá en una mayor producción de los sectores industriales que colocan sus productos en el exterior. La recuperación progresiva de la industria automotriz se debe, más que nada, al incremento de la demanda de Brasil. Luego de la crisis, este destino representa el 90% de los envíos totales que realizan las terminales argentinas.

Además, esa mejora propicia una producción mayor del rubro de metales básicos, como acero. En este caso, la mayor demanda se debe a la mejora en las previsiones de la industria y la construcción en los países desarrollados, los cuales aumentaran su demanda de este metal.

Por su parte, la menor caída en el nivel de empleo respecto de la que se pronosticaba a principios de la crisis, unida a la leve mejora en la confianza del consumidor (que releva la Universidad Di Tella) con respecto a los datos de principios del año, permite prever que existe un margen para la recuperación de las ventas.

Sin embargo, la persistencia de los incrementos inflacionarios y la restricción al crédito son todavía un escollo para que la recuperación sea más amplia. El tema del financiamiento es relevante a la hora de analizar las ventas de los productos de consumo durable, dado que resulta vital para el comercio de estos bienes.

A diferencia de lo que se espera para la producción industrial, la previsión para las actividades de la construcción en 2010 es menos favorable. El obstáculo principal para la recuperación será el menor presupuesto asignado a la obra pública para el próximo año. Dado que los principales programas de vivienda e infraestructura estatales son uno de los pilares de este sector, esta reducción en el monto total evitará un crecimiento mayor, a diferencia de lo ocurrido en años anteriores.

Para 2009, se espera que la construcción tenga una baja del 2% con respecto al nivel de 2008. Las previsiones para 2010 no son de crecimiento fuerte sino de una recuperación moderada. Eso se debe, en primer lugar, a la reducción de la ejecución de obra pública prevista, como habíamos comentado. Además, en el plano privado, no se espera un incremento importante de los proyectos de inversión. Asimismo, el crédito hipotecario seguirá siendo poco y a tasas elevadas.

Fuente: ABECEB